No se donde estoy,
y ni siquiera si hay salida
solo que así vivo día tras día.

Caminando en soledad
por el mundo, por la Tierra.
Celebro mi funeral fumando de mi piedra.

Y así estoy,
viendo como malgasto mi destino,
mas fuerte que uno mismo,
pero la calle no me hace olvidar.

Atrapado en mi callejón en ruinas
sangrando mi día tras día,
espero que de esta droga algo
haga efecto.
Controla mis alas, dame de ese calor,
ese sudor
tan frío y tan desolador
que cae gota a gota por mi frente.
Mas luego los "decentes" dicen "Púdrete"

Yo no soy ningún ladrón señor agente,
ni siquiera pretendo molestar a su Dios,
se que ni la cultura es mi solución,
pero aun así,
¿que le cuesta a usted dejarme ser yo?

¡Si es que ya no tengo nada!
me revuelco entre mis pisadas,
sufro desde que me quitaste esa mirada,
ahora, dejadme caer ante mis cagadas

y paso mil horas mirándome al espejo,
no soy pirata del estrecho
pero si que estoy muy lejos ¡tan lejos!
que ya no siento latir a mi corazón maltrecho

La savia me ahoga,
¿es que no ves que solo pido no respirar?
La paciencia se agota,
¡Solamente soy un crío en esta danza!
es la danza de mi corazón.

Y escondido entre esquinas,
los susurros de la vida
han dejado de contarme hacia dónde el viento gira
ahora solo soy un ente
que desaparece entre la gente
entre los claustros desbocados,
para ellos soy indecente.
He seguido mis instintos,
por ellos ahora ando aburrido.
Me siento en el banco a esperar a la muerte....
¿Me sigues?